Viviendo con asma bronquial

Viviendo con asma bronquial

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El asma bronquial se caracteriza por una obstrucción de las vías respiratorias, fundamentalmente los bronquios. Proviene del latín asthma, y este a su vez del griego ásthma, que se significa jadeo. Algunas enfermedades cardíacas como la estenosis mitral pueden producir síntomas parecidos a los del asma, que es lo que se denomina “asma cardíaca”. De ahí que se emplee el adjetivo “bronquial” para diferenciarla.

La obstrucción bronquial se caracteriza porque es reversible, total o parcialmente. Esta se debe a dos factores: la contracción de los músculos que rodean los bronquios, y a la inflamación de la pared bronquial que hace que su luz se estreche.

La inflamación de los bronquios contiene moco, líquido y células. Se manifiesta en pacientes como una sensación de falta de aire, tos y ruidos en el pecho al espirar el aire que se asemeja a un silbido (sibilancias), aunque no siempre tienen que estar presentes todos los síntomas en las crisis.

Otra característica de los pacientes asmáticos es que sus bronquios son más sensibles a ciertos estímulos como los olores intensos, humo de tabaco y polvo, risa intensa y llanto, respondiendo con un espasmo bronquial, mientras que las personas sin asma los toleran sin problemas.

Los síntomas de asma que hemos comentado no son específicos de dicha enfermedad. La Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC), las obstrucciones fijas por cuerpos extraños o tumores, o las obstrucciones laríngeas también pueden producir síntomas similares.

Es por esto que los pacientes deben ser estudiados cuidadosamente antes de emitir el diagnóstico, ya que los tratamientos son muy distintos.

Las manifestaciones del asma pueden variar según la edad del paciente. Por ejemplo, en el caso de los niños, la tos nocturna o durante el ejercicio físico puede ser la única manifestación.

Las causas del asma también pueden variar. En los primeros años de vida, la inflamación bronquial que causa el asma es debida en muchas ocasiones a infecciones víricas que en los sujetos predispuestos puede causar una intensa obstrucción bronquial. A partir de los cuatro años el asma suele tener una causa alérgica.

Según el Global Asthma Report 2014, unas 334 millones de personas alrededor del mundo sufren de asma bronquial. Es una de las cinco enfermedades respiratorias más prevalentes en el mundo. El asma produce limitación en la vida diaria de las personas que la padecen, reduciendo su calidad de vida, no solo por el aspecto físico, sino también por sus efectos psicológicos y sociales. El costo económico de esta enfermedad se debe en gran medida a la reducción en la productividad laboral de los afectados.

Tristemente, muchas muertes por asma siguen produciéndose alrededor del mundo, sobre todo en países pobres, debido a tratamientos inadecuados, mala adherencia al tratamiento o poca accesibilidad a las terapias.

En el caso del asma bronquial, es esencial la detección de factores ambientales que puedan contribuir a las crisis para su adecuado control tanto en el domicilio como en el ambiente laboral, así como la valoración de tratamientos de desensibilización específica como la inmunoterapia con alérgenos, por lo que estos pacientes son siempre derivados a la consulta del Alergólogo para estudio.

Con el diagnóstico temprano y el tratamiento adecuado, puede lograrse un buen control de la enfermedad, permitiendo llevar una vida normal y sin restricciones.